Atotonilco está ubicado al este de Jalisco, y créenos cuando te decimos que este encantador pueblo es más de lo que podría parecer, pero sobre todo te sorprenderá saber que no solo es un “lugar de agua caliente” por nombre, (el cual por cierto proviene del náhuatl), sino que en este lugar encontraras bellezas naturales para disfrutar en familia.
- Un origen interesante
Atotonilco fue fundado por allá del 1500, por el monarca purépecha Tzintzincha Caltzonzin, pero eso no es lo que llama la atención, pues parece un inicio común, lo que nos asombra es la razón por la cual decidió fundarla, y es que él estaba cumpliendo con su palabra, ¿te suena raro?, pues en realidad no lo es tanto, pues cuando el dios al que le era devoto le hizo el milagro de sanar a su hija con las aguas termales de ojo caliente, cerraron un trato, y así fue como nació Atotonilco el Alto.
Unos pocos años después de esto, los conquistadores españoles llegaron a colonizar y la evangelización fue encomendada a los frailes franciscanos; 300 años después le fue concedido el título de villa y pasaría a ser la cabecera de departamento, comprendiendo Ayo el Chico y Arandas. Para 1868 se decretaría que su categoría se establecería como ciudad, una que conserva hasta nuestro tiempo.
- Un ecosistema particular y un parque que seguro te encantara
Nos alegra contarte que Atotonilco es conocido por tener uno de los parques más bonitos y de disfrute de la región, en este municipio encontraras bosques de madroño y encino, palo dulce, huizache, nopal, palo bobo, tepame, guamúchil, Tepehuaje y mezquite, por no hablar del pasto, uno que es considerado como el pasto de mejor calidad (ahí tienes el tip, quizá quieras ir por un poco para embellecer tus jardines). Mira que también podrás encontrar lindos venados y conejos, una que otra serpiente de cascabel y en sus aguas de manantial podrás ver algunas carpas y charales nadando felices, ¿lo ves? Si decides venir estarás en conexión directa con la naturaleza, no solo porque estarás rodeado de un “jardín gigante” sino que podrás disfrutar de las aguas de manantial que proveen al pueblo, y que están esperándote en alguno de sus parques ecológicos, solo queremos hacerte una invitación especial, no olvides cuidar del entorno, recoger tu basura, conservar el agua limpia y no vandalizar las estructuras que forman los parques, pues esto ayuda a conservar la belleza del lugar.
- Un poco de arte y arquitectura que atrapan las miradas
¿Sabías que la Parroquia de San Miguel Arcángel fue diseñada por el mismo arquitecto que se encargó del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México? Apostamos a que no estabas enterado, pero así es. Esta iglesia de estilo plateresco y renacentista cuenta con una fachada con torre de cantera, su portada en cantera rosa es de estilo barroco y en su interior tiene columnas corintias y una cúpula con vitrales. Si continúas andando por sus calles encontraras dos edificios de hermosa arquitectura colonial que ocupan un hotel y una escuela primaria, qué lujoso, ¿no? Encontrarás también un molino de hielo de estilo neocolonial y un inmueble de 250 años de antigüedad en donde seguro querrás tomarte una o dos selfis.
Además, dentro del municipio podrás ver otras bellezas arquitectónicas imperdibles como la Parroquia de San Felipe de Jesús y las capillas del Calvario, Sagrado Corazón de Jesús, María Auxiliadora y Los Dolores. Y si alguna vez oíste a tu abuela hablar sobre “Las Carmelitas descalzas”, bueno, aquí es en donde se encuentra su convento, eso puede que despierte tu curiosidad, solo para ver porque causo tanto revuelo entre las abuelitas, y para los amantes del deporte que gustan de la nostalgia si continúan su paseo podrán ver el discóbolo erigido en honor a los juegos olímpicos de 1968.
Si decides visitar la biblioteca publica regional encontraras un mural realizado por el profesor David Cardona Medina llamado “Historia de Atotonilco el Alto”.
- Un poco de diversión y tradición
¿Tienes ganas de fiesta? Si tu respuesta es afirmativa, entonces el municipio te invita a visitarlo en septiembre, pues del 21 al 29 de ese mes se celebra la fiesta religiosa en honor a San Miguel Arcángel, el santo patrono de Atotonilco, seguro te vas a divertir como niño. Pero oye, si no puedes ir en septiembre, entonces el 8 de diciembre te estará esperando para festejar a la Inmaculada Concepción, ese día tienen una colorida tradición en la que adornan las calles de la ciudad con lazos de papel de china o telas, brindándole un aspecto bastante agradable y festivo, la banda de música alegra la ciudad con música y se queman algunos juegos pirotécnicos para coronar.
¿Recuerdas que te contamos sobre la fundación de la ciudad? Bueno, pues existe una leyenda alrededor, porque además el lugar en donde ocurrió el milagro de sanación es el parque ecológico que alberga aguas termales conocidas por ser sanadoras, hay quien dice que bajo el agua existe una criatura mitológica llamada “El Chan”, se cree que es un dragón y es el responsable de calentar el agua y dar vida al lugar, y es tan grande que su cola se está en el parque y su cabeza está en la parroquia… incluso dicen que controla el clima… ¿Te emociona? A nosotros nos pica el gusanito, pronto iremos en búsqueda del dragón, solo por pasar el tiempo.
De dragones pasamos a sacerdotes renegados, pues se dice que hubo un clérigo desmantelaba altares y se robaba los candelabros de oro, mismos que guardaba en una cueva, reuniendo así un tesoro… peculiar.
- Algo para llevar y para comer
Cuando vayas de visita a Atotonilco te recomendamos probar su deliciosa gastronomía, puedes desayunar un rico menudo, comer birria o un par de enchiladas y cenar unos sopes que están para chuparse los dedos, pero si estas con ganas de algo dulce entonces unos buñuelos o unos muéganos son para ti, aunque los cacahuates no están despreciables, y son la botana ideal. Y no creas que lo olvidamos, para el calor o para “bajarte el bocado” puedes beber un tejuino con nieve, ponche de frutas, aguamiel, tepache, o un rompope “atotonilli” tienes de donde escoger querido viajero.
- Por último… un par de cosas para hacer
Te recomendamos admirar las huertas frutales que tienen manantiales y presas en donde podrás practicar deportes acuáticos, solo o en compañía de tu familia y amigos. Puedes admirar todos los edificios arquitectónicos que se encuentran esparcidos por la ciudad, quizá comer un postre mientras caminas por la plaza y te tomas una fotografía en el quiosco, y si estas de humor puedes pasarte por el casino o la terraza. Tienes un menú turístico para escoger.
Ya sea que decidas ir tu solo de paso (aunque no te lo sugerimos), o decidas quedarte algunos días, tendrás de donde elegir actividades, podrás escuchar sus leyendas de boca de sus habitantes, probaras su comida tan apetecible y admiraras la belleza que es este vergel, “el jardín de Jalisco” desea que lo visites pronto, ven y vive Atotonilco el Alto.
