Un pueblo con un Récord Guinness, Etzatlán

Este municipio de la región valles se dice ser un rinconcito de bellezas hechiceras, y te aseguramos que es verdad, pues este municipio no solo es hogar de patrimonios culturales, sino que guarda algunas historias y sorpresas para aquellos que decidan visitarlos.

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El municipio de Etzatlán, ubicado en la región valles del estado de Jalisco, tiene un encanto peculiar desde sus orígenes prehispánicos, conocida por ser una ruta por excelencia, este poblado aún conserva un sitio arqueológico que de seguro tiene algunas anécdotas por contar a los visitantes y ni hablar del carnaval que cada año recibe a visitantes que no son solamente de la localidad, sino también nacionales e internacionales.

·         Un Récord Guinness multicolor

Nuestro estado de Jalisco es uno de los mejores destinos turísticos del país y del mundo, por si fuera poco tenemos algunos récords mundiales, en Etzatlán encontraras uno de ellos, el pabellón tejido más grande del mundo, un trabajo que le llevo a 200 personas 8 meses de su vida, tejiendo y tejiendo, puntada tras puntada de color, el resultado es una belleza, un trabajo artesanal hecho por manos jaliscienses, hecho con ingenio, perseverancia, creatividad y un profundo sentimiento de cariño por su localidad, algo que se refleja en la vista final, y te aseguramos que cuando que verlo decorando las calles es una experiencia imperdible.

·         La cultura del lugar… una peculiaridad que se vive

¿Sabías que Etzatlán tiene su propia canción? Bueno, pues así es, el municipio es un lugar musical, folclórico, allá donde mires encontraras algo nuevo, solo por no dejarte con la “espinita” te dejamos aquí un poco de la letra.

“Canción de Etzatlán”

Etzatlán, rinconcito de bellezas hechiceras sin igual, tus alegres, mañanitas se reflejan en tu cielo de cristal. Eres canto, de jilgueros y sonrisas de mujer, madrigal, de fragancias exquisitas dulce arrullo de un querer. Etzatlán, Etzatlán, de Jalisco, florido vergel, tus mujeres te darán, la fragancia y el olor del jazmín, tierra de ensoñación, mis cantares te dirán… ¡Qué tuyo es mi corazón! ¡Que te quiero con amor! ¡Etzatlán, Etzatlán, Etzatlán!

Esta canción es interpretada por músicos locales con tanto orgullo que seguro les infla el pecho de orgullo.

Sin importar en que época del año los visites, vivirás la cultura y las artes en su máxima expresión, pues las fiestas decembrinas siempre están llenas de vida, las calles se visten de gala y todo el pueblo te da sin duda la vibra de una villa navideña, llena de luces, piñatas y adornos alusivos, te decimos de una vez que no querrás irte; queremos contarte un dato que pocos saben, en Etzatlán encontraras que el día de la madre, el día del niño y las fiestas patrias son algunas de las festividades que más enorgullecen a los lugareños, pues sus conceptos de cada una se vuelven a las raíces de las que fueron creadas, se respeta a las madres y su capacidad de dar vida, se sabe con certeza que los niños son el futuro de México y sienten orgullo y gran respeto por aquellos que dieron su vida para hacer de este un país libre en el que poder vivir con plenitud… sin duda estos son algunos valores que apreciamos y de seguro tú también, pues la calidez de su gente te hace querer volver la vista hacia aquello que parece perdido.

Te diremos de una vez que a unos 15 minutos de la casa de cultura vas a encontrar el mirador más famoso, y puedes creernos cuando te decimos que no tiene ese título solo porque si, por si acaso, decides ir hasta el punto, que sepas que desde ahí tendrás un espectacular panorama, el hermoso municipio será el fondo para que tomes una que otra foto para presumir en tus redes sociales, ¡serás la envidia de todos tus seguidores!, van a querer saber en donde estas e ir corriendo de inmediato.

Para tu deleite este municipio tiene un lugar místico, pues desde que pones un pie ahí sientes que estás en otra época, no sabemos decirte con seguridad que es, quizá, los ecos de una vida pasada, las historias y murmullos que se impregnaron en cada espacio, o quizá el quiosco que te recibe nada más llegar… ¿Qué decir? Lo que, si es que cuando pongas un pie en esas antiguas minas que albergaban otro y plata, pues bueno… el aire cambia, el movimiento de los árboles parece tomar un ritmo distinto, las minas susurran canciones de otros tiempos… y las ruinas que se han fusionado con la naturaleza te dicen que ahí, ahí justamente hay una buena anécdota, si observas con cuidado, puede que veas a uno o dos amigos mirando por las ventanas de arco, y como curiosidad extra estarás en nada más y nada menos que un pueblo semi fantasma, ese lugar es de postal.

Si después de este viaje en el tiempo aún te quedan ganas, puedes pasear por la plaza central en donde encontraras ni más ni menos que ¡el primer quiosco de Jalisco!, esta hermosa edificación te aguarda, y nosotros queremos que vayas, te tomes una foto y la compartas con nosotros, nos encantaría verte. Pero, por si esto no fuera suficiente (que lo es), ¿sabías que la presidencia municipal y la plaza central están construidas sobre pirámides? Así es, más específicamente sobre guachimontones, que si no sabes que son aquí te decimos, son construcciones hechas de distintos niveles, siempre circulares, por si quieres verlos, aún se encuentran algunas estructuras en la zona arqueológica.

·         Patrimonios Culturales fascinantes

Si caminas hacia el norte del municipio, encontraras un sitio detenido en el tiempo, al igual que el pueblo semi fantasma, la estación del ferrocarril que ahí se encuentra parece un lugar curioso, si, esa es la palabra, la estación que aún conserva las vías por las que alguna vez transito el tren que conectaba con el pacífico tiene un halo muy peculiar que te invita a pasar ahí horas y horas, es como sí, nada más llegar no hubiera otra cosa que quisieras hacer, se evoca un sentimiento bastante especial, si aguzas el oído aún se puede escuchar el rumor del tren anunciando su llegada, el ajetreo de los viajeros que esperan con ansias llegar a su destino, las risas de emoción de los pequeños que aferran con vehemencia la mano de su madre y con la otra sostienen sus piruletas y globos, dando saltitos en el andén, se oyen las conversaciones animadas de las jóvenes que ríen entre sí contando quizá algún chiste o chisme de sociedad… si tienes la oportunidad, la estación sigue en pie y en espera de tu visita.

Aún no olvidas que mencionamos un mirador con vista espectacular, ¿verdad? Bien, hemos de contarte que este mirador fue el escenario de algunos crímenes, en tiempo pasado cuando las minas estaban en funciones, era muy común que los mineros fueran víctimas de algunos asaltos, y dicen los que saben, que por las noches se podían ver a estas pobres almas penando, con su lámpara en mano, la mirada perdida y a veces buscando justicia, así que para calmar a estos pobres desafortunados, un clérigo mando colocar una cruz para santificar el lugar, y desde entonces no se han vuelto a ver.

Pero esta no es la única leyenda que viaja de boca en boca, dicen por ahí que una noche como cualquier otra, fueron en busca del padre que en ese momento estaba  en el pueblo, dos hombres presurosos tocaron a la puerta del clérigo pidiéndole que fuera a confesar a un hombre que se encontraba en su lecho de muerte, el padre tomo su breviario y anduvo hasta la casa del pobre moribundo, llego hasta sus aposentos y le dio descanso confesándolo antes de partir al otro mundo, hasta ahí todo normal ¿verdad?, tú sigue leyendo, cuando el padre llego a sus aposentos se percató de que no llevaba su breviario, por lo que decidió descansar y volver al día siguiente para recuperarlo, sin embargo, al llegar al domicilio que había visitado la noche anterior la escena lo dejo perplejo, la casa estaba en pésimas condiciones pues parecía abandonada hacía muchísimo, ¿Cómo podía ser? Y si, al entrar en aquella vivienda, encontró su breviario justo donde lo había dejado… resulta ser que ahí vivió un hombre que fue asesinado por dos hombres, negándole la posibilidad de ser confesado, y aunque no se sabe la causa del homicidio, lo que si se supo fue que sus asesinos tuvieran la gracia de otorgarle esa oportunidad. Dicen que nunca es demasiado tarde…

El patrimonio cultural es el compendio simbólico de aquello que da identidad a una sociedad que  reconoce y conoce como suyo, es un vínculo generacional de sentimientos y definiciones que en colectivo quieren preservar algo que en su conciencia merece seguir, aquí en Tras las Huellas del Sabueso queremos decirte querido lector, que Etzatlán es un símbolo de aquello que merece ser conservado y mostrado a las futuras generaciones, te invitamos a visitar estas tierras tan misteriosas y llenas de lugares e historias sorprendentes.

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