Esta comida suculenta está presente en todos los desayunos de Jalisco, acompañado de unos frijoles fritos, un poco de pollo, un jugo de naranja o toronja, incluso quizá una limonada mineral, saboreándolos en compañía de hermanas y hermanos, con los sobrinos, con amigos, en una terraza de algún restaurante de la Zona Chapultepec, una cálida mañana en la que sopla aire fresco como no queriendo, música de jazz suave o bossa.
Por esto y más debes llevar este pedacito de Jalisco hasta tu comedor, donde sea que vivas, dondequiera te encuentres, toma nota y ponte manos a la obra.
· Ingredientes
– 6 tazas de agua
– 3 tomates medianos
– 10 chiles rojos secos
– 2 chiles pasilla
– Sal al gusto
– 15 tortillas de maíz
– 2 tazas de aceite vegetal para freír
– 1/2 cebolla finamente picada, puede ser blanca o morada
– 1/4 de queso fresco o de fundir, es al gusto
– 3 clavos de olor
– 2 pimientas negras
– 1 diente de ajo
– 1 pedazo pequeño de cebolla
– 1/2 pechuga de pollo deshebrada
· Preparación
1.- Agrega 3 tazas de agua, tomates y chiles en una cacerola y deja hervir. Reduce el fuego y cocina a fuego lento hasta que se ablanden, aproximadamente 10 minutos.
2.- Calienta las 3 tazas de agua restantes en otra cacerola.
3.- Escurre la mezcla de tomate y chiles y transfiere a una licuadora, agrega la pimienta, los clavos de olor, el ajo y el pedazo de cebolla. Licua hasta que la salsa esté suave, agregando aproximadamente 1/2 taza de agua caliente si es necesario. Para sazonar, agrega sal.
4.- Corta las tortillas en trozos medianos con unas tijeras de cocina, o en su caso con cuchillo.
5.- Calienta el aceite en una olla de fondo grueso a fuego medio-alto. Fríe los chips de tortilla en lotes hasta que estén firmes y crujientes, aproximadamente 1 minuto por lote. Escurre sobre papel toalla y deja enfriar.
6.- Unta aproximadamente 1 cucharada de aceite caliente en una sartén grande. Vierte la salsa de tomate. Añade 2 1/2 tazas de agua caliente y cocina a fuego lento. Agrega los chips de tortilla y reduce el fuego, debe estar medio-bajo. Revuelve hasta que los chips estén de color naranja brillante pero aún algo crujientes, aproximadamente 1 minuto.
7.- Transfiere a platos para servir y decora con cebolla, pollo deshebrado y queso, ya sea fresco o de fundir.
¡Y listo! A disfrutar un buen desayuno, o si te sientes intrépido, puedes comerlos a la hora de la comida.
