Tempisque. En sus buenos tiempos fue un pueblo habitado por una pequeña cantidad de personas, aquí la vida transcurría con calma como en todo poblado, o algo así, pues dicen por ahí que “pueblo pequeño, infierno grande” y puede que no esté tan alejado de la realidad, pues casi siempre los dichos vienen de verdades tremendas.
Si acaso te entran las ganas por visitar este lugar abandonado, sabrás que la escena es bastante triste, empezando por un hecho que no falta, se dice que aquí suceden cosas extrañas, cuentan que hay apariciones que se esfuman tal y como llegaron, que la energía es bastante peculiar por decirlo de alguna manera.
Puede que la historia de cómo este lugar se convirtió en un pueblo fantasma no sea fuera de lo común, pues atiende a un hecho simple, el progreso, ya que se dice que necesitaban los terrenos para la construcción de una planta hidroeléctrica, que al final nunca sucedió, pero no por eso le quita el misterio. Pues simplemente llegar, te das cuenta de cómo la naturaleza reclama lo que es suyo por derecho, y el paso del tiempo parece detenerse por instantes.
Si acaso la aventura te interesa y el misterio es tu motivación de cada día, entonces tienes que comprobar por ti mismo este pueblo, ver con tus propios ojos lo que solo puede entenderse si se vive, y determinar si acaso en esa visita te encuentras solo o estás… acompañado.
Recuerda que Jalisco está lleno de leyendas, misterios y magia, y que cada rincón tiene una historia que contarte.
